Monday, August 10, 2015
Benjamín Mendoza y Amor Flores
Tuesday, August 9, 2011
Juan el desenterrador
Las nubes llenan los pensamientos,
casi siempre ayudando a malentender el entender,
el vendaval es el preludio del hecho,
las herramientas una pala y mucha voluntad,
es el oficio maldito de Juan, desenterrador.
No se deben lavar las manos antes del acto,
puede provocar un contraste demasiado peligroso,
el peinado debe reflejar las botas, que son importantes,
por sobre todo la conciencia malentendida
de comprobar que cada día ese alguien,
de quién solo los vivos se acuerdan,
está cada vez más muerto.
Monday, February 8, 2010
Lechuza el universitario
Las calles se han hecho para el recorrido de mi vagabundez, no hay espacio para ninguna otra práctica humana,
aún no se han recorrido todas, por ende, las cuerdas de la guitarra no han sonado en todas, las calles son;
sin guitarra una canción, sin luces un callejón, con agua una torrentera y sin vagabundos nada.
Las calles incitan a hacer de las penas canciones, y de los corazones nudos de tormentas,
mas el impacto en la gente será de alegría, no se tiene explicación alguna para este fenómeno,
sólo Lechuza supo recorrer las calles y cantando sin reflejo, tuvo que partir por algún callejón.
Las calles padecen de prejuicios ajenos, nadie pudo explicar empíricamente qué es lo que paso,
después de los recorridos y delimitaciones naturales, nadie ha comprendidos las diferencias,
entre lo que puede ser vida o muerte, ying o yang, marioneta o vagabundo, mas prejuicio.
Las calles no te enseñan el camino, uno tienen que sufrir y descansar, ser vagabundo o no ser,
trenzar la soledad, saber que bajo su ala esta la niebla de ser un perfecto desconocido,
pero al mismo tiempo conocerse al extremo de llegar a verse como una simple rutina.
Las calles te predicen el destino, si dando la vuelta de la juventud hay un callejón sin salida,
la claridad de lo intenso y rápido, de crecer mucho, de acabar cómo un principiante, o universitario,
malevo o uno de aquellos que de noche no duerme para seguir a todo tipo de roedor.
Las calles no tienen estaciones, pero el saber que conduce a una sola quimera basta,
es simplemente así, un desierto de pasiones que se encienden en uno y se apagan en el mismo,
con la excepción de que algunos dejan rastros como luciérnagas, que apenas se ven.
Sunday, January 31, 2010
El cómo, riesgo desde la altura
No hay otra aventura que se compare, inténtalo vuelve a pensar en mí, el inicio tiene la dulzura de una trompeta jazz, con el aroma de noches duras, puede ser muy largo. En realidad tomara más del tiempo necesario, preparando todo el maquillaje y el olor de los extraños, extraños por que la lluvia sobre los zapatos no es la misma, es distinta, la mitad de tu serenidad y la mitad de mi paciencia, envuelto en papel periódico, con apariencia de regalo pobre. Entonces, viene lo que no dura, o casi no dura, el regalo se desparrama para dejar en claro que no es el espacio ni el tiempo sino el recuerdo, este pequeño instante. Lo demás es puro llanto de ambas partes.
Ya entenderás esto, de las hogueras de corazones, y el llanto debe calmarse al entender que solamente estás sola, te olvidaras de mí por un tiempo, lo que quiere decir que volverás a pensar en mí, y se dará una especie de ciclos en forma de espiral, hasta que en esta especie de espacio, entre tú y yo, sólo reine el olvido.
Saturday, January 23, 2010
¿Qué más puede ser, que una curda?
Y con la música puesta sobre el muslo, recorriendo esa curva en forma incompleta de herida, se ha desnudado la pena que simplemente ha hecho pedazos el olvido, no es que acabe en este instante la función, ha demorado demasiado tiempo el que me hayas abierto el ventanal, no te diste cuenta que vengo de un país que esta de olvido en la memoria de los demás, y pese que aún puede dar, y sin que lo sepan, mucho más.
Lo básico se remite a toda esa canción que ronda la lástima, ese instante que es una especie de maldición, y más aún, si uno no entiende la vida como un camino hecha a propio paso, sabiendo que nos hace daño, que nos blanquea el licor de naranja y para que instantes después nos acaricie y decirnos tranquilamente -"Contame tu pena, habla sin pensar el pasado"-, después de ser el culpable de que estemos en el bajo fondo, una lágrima de vino o más bien quizás una canción de algún solitario, que ha derramado el vino en la lágrima, pero este viejo amor es que hace que el sol mande el alba ha aparecer, y qué todo en apariencia sea sólo una simple curda.
Tuesday, January 19, 2010
Ideas
Me remito a pensar encima de mi nube, nada más tranquilo que pensar uno en su nube, malogrando el cerebro por pensar o pensando para malograr el cerebro, pero aún así es la nube de uno, ese uno que no es un conjunto de células sino las células en conjunto, en pos de un solo fin. Más la idea de pensar o de pensar una idea se remite a los hechos fantásticos de un género, ese género que se hila despacito imitando a nuestra nube, tratando de disipar esa inmensa pregunta de saber en qué momento y cómo uno se remite a pensar, esperando terminar el hilado del género que es proyección del fantástico hecho de poder entender que nuestros demonios nos escupen palabras y no así pensamientos, de ahí uno sufre para parir una idea.
Saturday, October 31, 2009
no es que entre en shock, se pararon mis ojos,
porque no quise llorar, y ¿acaso eso no se puede hacer?,
quienes no llorarán en mi funeral hacen apologías.
La pesadilla no es la vida, en realidad esta, es muy dulce,
siempre te llama a seguir adelante aunque tengas razón,
retumba como canción subliminal en medio del silencio,
y te encuentra otra vez y no sabes que decir, ¿dios es dios?
Solo era una broma, no se puede sentir absolutamente nada,
abrirás lo que conoces, y no dirás nada, absolutamente nada,
sólo, solamente descarga la jeringa y no intervengas mas,
que siguen tocando la puerta, y nadie excepto tú la abres.
Siempre miraste a través de ella, y no hay vida después de la muerte,
lo raro es que existe la vida antes de la muerte, ¿casi una hora?,
en realidad son marcadas las supersticiones, un medidor de cruces,
amarres y escaleras que te llevan a un lugar que te autodestruye.
En realidad no me des más rechazo el desmembramiento,
acepto la mutilación directa, sin morir aún existe la vida,
no hay camino a ninguna parte, solo existen los pasos a dar,
no me recuerdes, sino crees no me recuerdes, ¡miénteme!.